Alrededor de las 12 del martes, Kim Seong Jim fue dado de alta del Hospital Perrupato, donde estuvo internado desde el lunes, cuando ingirió glifosato, un potente herbicida utilizado para eliminar las malezas de los campos, tras confesar que había asesinado a Kyungja Yoo, de 49 años. Estaba con custodia policial por si intentaba escapar o quitarse la vida una vez más.

Luego de salir del nosocomio, fue trasladado directamente hacia la Fiscalía de San Martín, donde pudo hablar con un asistente legal de la Embajada de Corea del Sur que llegó a Mendoza para interiorizarse en la comunidad coreana que vive en una finca en San Martín, además del hecho de violencia ocurrido allí. Por recomendación del abogado, Kim Seong Jim se negó a contar lo que pasó, y directamente fue imputado por femicidio.

Luego de esto, se ordenó que sea trasladado directamente al penal, donde esperará para una audiencia de prisión preventiva mientras continúa la investigación.

Para los pesquisas, hay pruebas suficientes para acusarlo de femicidio, ya que además de los testimonios de los integrantes de la comunidad coreana, están las imágenes de las cámaras de seguridad ubicadas en un espacio común, donde se ve que el hombre atacó a Kyungja Yoo cuando descansaba, la ahorcó con sus manos y luego se llevó el cuerpo.

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